El reloj marcaban las 18:30 cuando regrese al local después de haber ido a mi casa a bañarme y a comer algo; confieso que toda la mañana tuve una sensación extraña, era como si mi mente no alcanzara a creer que todo estaba listo, que después de tantos días de trabajo, días de pintar, construir tarimas, escenario, limpiar y demás detalles el momento tan esperado estaba por llegar, SoZo estaba a punto de abrir las puertas de su nuevo local, un local diferente a todos los anteriores, después de 3 años de estar en distintos lugares hoy mi querida iglesia estaba a punto de iniciar una etapa completamente diferente en un local en el que sabemos que Dios hará grandes cosas; y no es que Dios no haya hechos cosas antes y mucho menos pienso que las otras localidades que hemos tenido hayan sido malas, simplemente se que desde el sábado pasado las cosas no serán iguales para nadie.
Con todo listo, dio inicio el servicio…no tengo duda que Dios está detrás de cada cosa que pasa en su iglesia la primer canción de este día fue “venimos a rendirnos” "venimos a rendirnos y a adorarte…Jesús…venid y adoremos…a Cristo El Señor” que manera tan perfecta de empezar esta etapa; y es que si algo hemos aprendido con los años es que no podemos hacer nada si no existe en nosotros una actitud de dependencia total en El Señor; me siento orgulloso de decir que SoZo es mi iglesia, porque aunque estamos lejos de ser una iglesia perfecta hay una necesidad de depender al 100 % de Cristo y eso nos da esperanza de seguir el camino que El tiene delante de nosotros.
La sensación que tenía desde que empezó el día continuaba en mi a esta hora pero ahora con mayor intensidad, era algo muy extraño, intentaba cantar y simplemente no podía, mi garganta era un nudo, mis labios no podían pronunciar ni una sola palabra, mis ojos estaba llenos de lagrimas que por más que intentaba contenerlas caían sobre mi cara. Esta noche tuvimos casa llena y a la mitad de la alabanza tuve que ceder mi lugar para que alguna visita se sentara, desde ese momento mi lugar fue detrás de una silla en la última fila, parado…sin moverme, intentando que de mi boca saliera algo…pero nada salía; no estaba distraído, no estaba cansado (aunque tenía motivos para estarlo) simplemente algo estaba sucediendo en ese lugar que las palabras no alcanzaban a expresar lo que mi corazón y mi espíritu estaban sintiendo, el corazón me latía a todo lo que alcanzaba a dar “te amo, gracias, te amo, gracias” eran las únicas palabras que medio alcanzaban a salir de mi…de pronto me encontraba sumergido en una adoración indescriptible, todos mis sentidos estaban unidos en una sola dirección, cada parte de mi solo podía expresar adoración…adoración y mas adoración; de verdad no encuentro palabras para explicar el momento, mi espíritu estaba unido al Espíritu de Dios y mis sentidos y voluntad estaban sujetos a Él para que Él guiara y tomara este tiempo para Sí mismo; para este momento mis ojos ya eran unas fuentes de lagrimas, fue entonces que en medio de este tiempo, aun con la casa llena, ahí estaba yo rodeado de muchos pero como si el encuentro fuera particular…desde la fila de hasta adelante vino a mi Robbie y me dijo lo siguiente: “sigue adorando, sigue…Tato, como cuando Moisés vio la zarza y que esta no se consumía porque la misma gloria de Dios estaba ahí, así será este lugar, este será un lugar en donde la gloria de Dios no se consumirá jamás, porque Él está aquí, porque en este lugar Dios quiere hacer y hará grandes cosas y tu serás parte de ello”. Que palabras tan oportunas, que mensaje tan completo que confirmación de que este es un paso que viene de Él.
Lo que Robbie me estaba diciendo esta en Éxodo 3 (te recomiendo que leas el pasaje completo). Imagina la escena, Moisés quien tiempo atrás era un príncipe en Egipto ahora era el pastor de las las ovejas de su suegro y estando cumpliendo su deber Dios llama su atención a través de un arbusto seco que no se consumía, sin duda alguna era un evento sobrenatural en el que Dios le estaba mostrando a Moisés su poder y domino sobre lo natural, situación que sin duda Moisés recordaría toda su vida.
Éxodo 3 contiene grandes verdades que quiero compartir:
• Dios siempre te va a llamar cuando tú estás haciendo lo que es tu obligación. Creo firmemente que Dios no llama a flojos; no es lo mismo lo necio del mundo, lo débil y lo vil a ser un flojo y desquehacerado (1 Cor. 1:26-28). Moisés estaba cumpliendo con su responsabilidad (Ex. 3:1).
• Dios siempre toma la iniciativa, desde siempre cuando Dios quiere hacer algo a través de un hombre (mujer) siempre es Él quien te llama, a Moisés se le apareció a través de la zarza (Ex. 3:2) y luego lo llamo por su nombre (Ex. 3:4), Dios hoy día sigue usando una diversidad de cosas para llamar nuestra atención, no se cual ha sido tu experiencia, pero ten por seguro que Dios no está encerrado en una caja de cartón y que Él puede estarte llamando aun desde un puño de pasto seco.
• El llamado de Dios no es ajeno con su personalidad y nunca difiere con su carácter (Ex. 3:5-6), es verdad que como humanos no tenemos la capacidad de estar delante de Dios a menos que Él nos vea a través de la obra de Cristo en la cruz pero también es cierto que Él quiere hacer de nosotros hombres y mujeres que se identifiquen con Él cada día (Gal. 2:20).
• El llamado de Dios va mas allá de tus expectativas, planes y sueños y siempre es para cumplir un propósito eterno. (Ex. 3:7-10), a veces al leer este pasaje pienso que en la mente de Moisés rondaban miles de preguntas sobre porque esta misión, sobre porque él y porque en ese momento de aparente estabilidad que atravesaba.
• Dios siempre respalda su llamado y promete estar ir con nosotros siempre aun con las excusas que podamos poner delante (Ex. 3:12-14, Mt. 28:20).
• Lo único que Dios quiere de nosotros es una respuesta como la que obtuvo de Moisés HEME AQUI (Ex. 3:4) no me puedo imaginar que hubiera pasado si la respuesta de Moisés hubiera sido otra, estoy seguro que no hay posibilidad de error en el pasaje y todo paso según el plan divino, sin embargo cuando pienso en mi y muchos que me rodean pienso en la respuesta que le hemos dado a Dios cuando Él nos ha llamado.
No sé cuál es tu experiencia, desconozco tu situación y momento actual sin embargo déjame animarte a que te asegures de que si Dios esta llamándote tú respuesta sea heme aquí, te aseguro que el camino tendrá miles de montañas y ríos que atravesar pero si Dios esta llamándote confía en Su llamado y se fiel a Él. Moisés cumplió el llamado que en el día de Éxodo 3 Dios le estaba haciendo, muchas cosas pasaron en su vida y en la del pueblo pero Dios cumplió su propósito para con ellos.
Hoy, tres años después de que SoZo nació, después de cambios y movimientos nos encontramos en este lugar con la seguridad de que El que ha levantado a esta iglesia es Dios y que su presencia estará con nosotros siempre y que Su gloria llenara cada día el regalo que Él nos hado con este nuevo local y que Él quiere hacer de esta iglesia una iglesia sana fuerte y a través de la cual muchos entreguen su vida a Cristo.
Hoy, después de seis años que Dios implanto en mi un llamado para servirle veo su mano junto a mí, y aunque las montañas han sido altas y los ríos profundos el cumplirá su propósito en mi (Sal. 138:8) y estoy seguro que también lo hará en tu vida.
Pronto escribiré más a detalle sobre lo que Dios está haciendo en mi vida y lo que viene en los próximos meses si Él lo permite, de momento espero que esto sea de ánimo para tu vida.
Saludos y bendiciones.
